Vuelta al cole
¡Ay, la lluvia! Desde que vivo en Tarragona, la veo poco. Pareciera que las nubes se desviaran al acercarse a esta zona. En las noticias siempre veo como llueve muchísimo en Girona, Lleida y Baleares, pero poco en Tarragona. No sé exactamente el porqué, pero las teorías conspiranoicas de que los de PortAventura hacen algo para evitarlo no me sirve. Hoy parece que ha decidido no desviarse, ya era hora.
Pero así como la lluvia se tomó unas vacaciones de pasar por Tarragona, yo lo hice con Productibits. No escribí en todo agosto. Por un lado, porque siempre viene bien descansar, por otro lado, porque estoy intentando hacer caso a los consejos que doy, y lo de trabajar por temporadas está bastante bien. En agosto tocaba dedicarme a otras actividades que no fueran Productibits. También cambié mi rutina ese mes y empecé a hacer ejercicio por las mañanas, con lo cual mi ritual de escribir desde la cafetería antes de empezar mi jornada laboral se vio truncado.
Y ahora, la “vuelta al cole”. Es muy probable que te hayas tomado vacaciones este agosto, o quizás eres de los que espera a septiembre u octubre para evitar los altos precios y aglomeraciones. El consejo de hoy te servirá en ambos casos.
¿Cómo retomar la vuelta al trabajo después de varios días fuera?
A mí, personalmente, me gusta dedicar al menos un día (o dos, dependiendo del tiempo que estuve de vacaciones) a simplemente actualizarme con lo que ha ocurrido. Es muy difícil trabajar al 100% después de estar un tiempo fuera. El primer paso es aceptar que esos primeros días no serás productivo, así que aprovecha de organizarte.
Empieza haciendo “Inbox Zero”. Si eres como yo, en vacaciones se te ocurrieron cosas que hacer y las apuntaste en la bandeja de entrada que uses para tus ideas. Es súper importante tener un sitio donde apuntar algo y olvidarte hasta procesarlo. Lo comenté en el artículo de hazte con todos, y estoy seguro que en algún otro más.
Tu bandeja personal debería ser la primera a limpiar, luego revisa la herramienta de comunicación que usa tu empresa. Muy importante aquí: Solo revisa y apunta lo que tengas que hacer. No te dejes llevar por una espiral de tareas y cambios de contexto que te harán llegar hasta el final del día sin haber salido de allí. Usa la regla de los dos minutos: si puedo hacer esto en dos minutos o menos, lo hago, si no, lo apunto para después. DOS MINUTOS. Cinco no es igual a dos. Diez tampoco. Es matemática básica, pero es importante recalcarlo.
Después los correos, y aquí igual que en la recomendación anterior. Lo que puedas hacer en dos minutos o menos, hazlo. Lo que no, lo apuntas. Ya he escrito sobre estrategias para revisar correos aquí y aquí.
Y ahora toca reorganizar las tareas. Da igual el método que utilices. Puede ser Kanban, GTD, una lista normal y corriente, el calendario. Pero organízalas. Decide cuáles harás, cuáles delegarás y cuáles no harás, que también es importante.
Y tómate un café o algo. Que has hecho un gran trabajo. Felícitate por ponerte al día y sigue adelante. Lo importante no es estar todo el día ocupado. Es dedicar el tiempo a las cosas correctas. Sin organización, es imposible que sepas que lo estás haciendo bien.
Nos vemos el lunes que viene.